Levántate, aprende a andar, aprende a trabajar.
Aprende, aprende sin mirar, no voltees la cabeza ni mires atrás.
Camina recto a paso ciego, ¡yo seré tus ojos, yo encausaré tus pies! No te adelantes, ni te atrases, sígueme como lo hacen los demás y no te olvides ¡cuidado con mirar atrás!
No aprendas a aprender, siéntate en tu pupitre y aprende a obedecer.
Me darás tu mano, te vendaré los ojos y seguirás mi voz, hazlo, acompáñame, ¡Pero cuidado! si te tropiesas por mi camino no me detendré.
¡Mira qué feliz eres! ¡Mira cuánto has crecido! ¡Mira cuánto me debes! Algún día ya sabrás retribuirlo.
Ahora, para la lección de hoy, repitirás conmigo: "yo soy libre".
Domingo Valdés
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