Ir al contenido principal

La revolución de las liebres



Los animales iban llegando al lugar de encuentro, millones de liebres de todos los países del mundo llenaban el lugar y la orquesta de chillidos se iba haciendo cada segundo más ruidosa. Se notaba exaltación y excitación por parte de aquellos mamíferos, como si algo grande los esperara. Sólo en ocasiones que lo ameriten se habían reunido tantos seres de la misma especie en un mismo lugar. Ésta era una de ellas.
La liebre alfa se subió a una gran roca y comenzó.
-“Compañeros, soplan aires de revolución, de nosotros depende convertirlos en un huracán.
Los he reunido hoy para vengar una parte de nuestra historia que ha sido escrita por muchas civilizaciones sin saber la verdad.
El primero en desprestigiar nuestra sagrada raza fue aquel griego que todos conocen, un tal Zenón de Elea quien con su teoría de la liebre (Liebrquiles) y la tortuga nos dejó mal parados frente a todo este planeta cambiando lo que realmente había sucedido.
Con el paso del tiempo otros hijos del demonio se han encargado de jugar con esta historia, comercializándola y enseñándosela a sus sucesores.
No sé como nuestros antepasados no habían tomado cartas en el asunto y lo dejaron pasar, pero yo me siento con la responsabilidad de cambiar la historia de nuestra prestigiosa estirpe.
¿Por qué han de seguirme a mí? Porque soy yo el único descendiente directo con vida de Liebrán y Liebra, los que subieron al arca y se encargaron de refundar nuestra casta. En mi sangre está el liderazgo y por mis venas corren las ansias de devolverle a esta raza lo que es suyo.
Mi bisabuelo fue el que corrió en la famosa carrera que “nos derrotaron las tortugas”, nuestro nombre fue manchado y hay que limpiarlo!
¿Saben ustedes como nos han menospreciado los humanos? llega a tal nivel su desprecio que juegan a matarnos. Un familiar nuestro fue asesinado por un demonio de tan sólo 13 años, y para más remate después nos convierten en guiso. Los franceses, por ejemplo, violan nuestros derechos de liebre, cocinándonos como “civet de lièvre”. Es por ello que hemos recurridos a la famosa ONG animalista, “liebres verdes”, para que nos apoye en esta lucha y prohíba cualquier plato basado en nuestra especie en cualquier restorán humano.
Por eso les invito a que empecemos una nueva era, en la que las liebres vuelvan a reinar y los humanos y las tortugas sean nuestros esclavos”.
-¡VIVA LA LIBERTAD!- gritaron todas al unísono
Si Pedro se hubiese dado cuenta de lo que sucedía en su criadero nada hubiera cambiado y el mundo seguiría como antes…
Juan Pablo S Silva

Comentarios

Entradas populares de este blog

Bienvenida

12 de Diciembre en el Colegio Tabancura Hace calor y el año ya casi termina. El timbre resuena estridente por cada pasillo del colegio y treinta y seis alumnos entran en tropel para rendir el examen mas temido del año: física específica. Los treinta y seis transpiran helado y están muy nerviosos, piensan en lo poco o mucho que estudiaron, en como están a punto de empezar las vacaciones, o de como, por culpa de este examen, no entrarán a la universidad. Siguen caminando hacia la sala, pero, en un instante, dejan de ser treinta y seis y pasan a ser treinta y cinco... Uno de ellos ha escapado despavorido, sabe que le irá pésimo y decide que no vale la pena entrar a la sala... En un momento de distracción general, el alumno, nuestro alumno, corrió desesperadamente a las salas de entrevistas. Cuenta la leyenda que este alumno, cuyo nombre prefiero no revelar, entró en las salas y producto de un largo año de estrés escolar, cayó rendido en uno de los sillones. Nadie recuerda que sucedió...

Final

Por lo menos, quedé tranquilo. Había hecho todo lo que estaba al alcance de mi mano pero igual no se logró lo que quería, lo que queríamos. Me tendré que adecuar al nuevo presente o simplemente tomar el primer vuelo al otro rincón del mundo, esa idea me sedujo más... Agustin Eguiguren

Mi vida.

                                                                                                                               Mi vida. En su reflejo Encuentro mi fuerza Y calmó mi sed Soy un grano de arena Que por la tierra Vive y muere Porque de aquí soy Y nunca me largaré